diumenge, 22 d’abril del 2012

Coloso de la Historia

EXTRET DE Diario Octubre

El 22 de abril de 1870 vio la luz en la ciudad rusa de Simbirsk (hoy Uliánovsk), a escasos metros del imponente río Volga, el genial Vladimir Ilich Lenin, quien hizo posible el advenimiento de una nueva era para la humanidad, la del socialismo.

Siendo un gran filósofo, economista, sociólogo y líder revolucionario, Lenin, quien se presentó en el escenario de la lucha de clases como firme seguidor de Carlos Marx y Federico Engels, se basó en el análisis y la generalización de nuevos acontecimientos y fenómenos históricos, y llevó adelante la doctrina revolucionaria en todos sus aspectos; hizo aportes teóricos importantes al marxismo, con lo cual abrió una etapa cualitativamente nueva para dicha doctrina.

A él, además, le correspondió encontrar el campo de acción concreto para llevar la teoría a la práctica. La tesis leninista que postulaba la posibilidad del triunfo del socialismo en un solo país, y su legendaria materialización con la Revolución de Octubre y el establecimiento del primer Estado socialista, son pruebas contundentes de cómo se fundieron, en el leninismo, la teoría del socialismo científico y la práctica revolucionaria.

El acontecer mundial con sus profundas contradicciones, y aun con sus reveses, confirma la certeza de las ideas de Lenin con respecto al desarrollo de las ideas socialistas y los movimientos emancipadores de los pueblos oprimidos.

“Solo la revolución proletaria socialista puede sacar a la humanidad del callejón sin salida creado por el imperialismo y las guerras imperialistas”, decía Lenin y su visión nos acompaña: “Cualesquiera que fueran las dificultades, los reveses temporales posibles y las oleadas contrarrevolucionarias, la revolución triunfará, la victoria final del proletariado está asegurada”.

El profundo magisterio de este revolucionario es un monumento vivo, de ahí que sea, sin lugar a dudas, un Coloso de la Historia.